Publicado: Martes, 02 Junio 2015; Escrito por José Monegro.
El Movimiento de Cursillo de Cristiandad de la arquidiócesis de Santo Domingo realizó en la Casa San Pablo un Santo Rosario para conmemorar el fin del mes de mayo, dedicado a la Virgen María y a todas las madres.
En el rezo del Santo Rosario participaron los miembros de la Escuela de Dirigentes del Movimiento, en un ambiente acondicionado para tener ese encuentro con la Madre de Dios y remembrar su vida acompañando a su hijo Jesucristo.
Fue por eso que la Comisión de Piedad de la Escuela de Dirigentes, que tuvo a su cargo la organización del momento de oración, escogió el conocido como “Parquecito de la Virgen”, en la parte lateral del auditorio de la Casa San Pablo. Lo decoró con hermosas luces que colgaban de las ramas de los árboles.
Al término del rezo del Santo Rosario, los sacerdotes Víctor Rodríguez y Robert Briskman concelebraron una misa dedicada a todas las madres cursillistas. Les acompañó el diácono Adic Ramírez.
En su homilía, el padre Víctor Rodríguez ofreció la noticia a los presentes sobre su regreso a la República Dominicana y su inmediata incorporación a los trabajos con el Movimiento de Cursillo de Cristiandad en la arquidiócesis de Santo Domingo.
Planteó la necesidad de enfocar las acciones en atraer los jóvenes usando las nuevas tecnologías que el mundo nos presenta, tales como las redes sociales y el internet.
Señaló que durante su estadía en Puerto Rico, donde estuvo de servicio por disposición de su congregación, pudo contactar el surgimiento de otros movimientos apostólicos que utilizan la metodología de los Cursillos de Cristiandad, lo cual demuestra los aportes del MCC a la Iglesia, pero también representa el reto de la renovación del mismo.
