Publicado: Jueves, 07 Agosto 2014; Escrito por Ingrid Ramos Hernández
Queridos hermanos cursillistas (Hermanos en Cristo). Me dio mucho gusto haber tenido y vivido una experiencia tan maravillosa, la que tuve en el cursillo. En el conocí unas hermanas que no sabía que tenía y que son muy especiales para mí y para Dios también.
Le pido al señor que me de la luz, paciencia, fe, amor y comprensión, para poder ayudar a mis hermanos en Cristo, todos los días de mi vida. He tenido situaciones, que ahora he afrontado con la ayuda de Dios y con mi Fe fortalecida. Sé que Dios tiene algo muy especial para mí y que para Jesús, amar, es servir.
Hermanos, lo más hermoso y maravilloso fue poder recibir el cuerpo de Cristo, ya que tenia tantos años que no lo podía recibir, porque me sentía que no lo merecía, pero ahora si puedo con la gracias de Dios.
Amén.