Por: Henry Valenzuela
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Vivimos tiempos difíciles; pánico, desesperanza,desinformaciones que nos alteran y presionan a talpunto de querer tirar la toalla. Hay personas que serinden con mucha facilidad porque no han encontradoalguien que los motive a seguir adelante con la mirada puesta en Jesús.
Jesús fue un motivador excepcional. Él actuó, habló e hizo obras para animar a las personas a avanzar, a alcanzar lo más alto y hacer más de lo que hubieran soñado que era posible. Como si fuera el entrenador de un equipo deportivo, demostró a su gente que se podía vivir la vida en un nivel superior. Él sabía cómo ayudar a la gente a ir de lo normal a lo extraordinario. Motivó a las personas no solo por medio de sus palabras sino también por medio de su ejemplo.
En tiempos de crisis, tempestades o desierto esta actitud demotivar o animar a los demás debe ser un ejercicio importante en el cual todos debemos participar. Hay personas cercanas a usted esperando por una palabra, un gesto, un mensaje, un ejemplo para ellos levantarse y pelear sus batallas.
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